16/07
“Después de varias semanas me di cuenta de porque no
habían tenido problemas en dejarme con Ronal a solas. Era muy sencillo, Ronal jamás
me vería de esa manera, pues Ronal tenía otras preferencias… podría decirse que
a Ronal le simpatizaban más los hombres o le gustaban las chicas pero para
otras cosas como arreglarse o hablar sobre la vida, era más que entretenido y
chistoso ese hecho. tuvimos una muy buena relación amistosa, el me llamaba Loli,
porque decía que me parecía a una gatita que él conoció llamada Loli, pero era
el único que se acercó a hablarme y porque compartíamos habitaciones. a nadie
le parecía simpatizar, pero que me importaba a mí ni que eso significara el fin
del mundo después de todo era muy cierto que yo era insensible así que no me
esmere mucho por complacerlos, nunca lo hacía y tampoco me importaba, cuando se
cumplieron seis meses allí a media noche llego una visita no muy esperada. Desde
esa noche Ronal y yo compartíamos un secreto.
Desde esa noche un hombre nos acosaba. Mi corazón se aceleró
del miedo y pensé que algo muy malo me ocurriría. Fue una sensación que no
quisiera volver a experimentar, no pude dormir bien en ese tiempo… estaba tan
frustrada y molesta por lo que me pasaba, las ojeras cubrían mi cara por no
poder dormir, estaba tan cansada, de verdad estaba cansada, tenía tanto miedo y
yo no era muy estúpida para callármelo pues no tenía nada que perder, pero no
me creyeron, y Ronal pago las consecuencias por mis estúpidos actos de aquel
momento fue entonces cuando me di cuenta de cuán importante era Ronal en mi
vida y que sí tenía algo que perder. Ese hombre savia lo que hacía y lo vi
todo, antes de golpear a Ronal lo envolvió con la sabana pues así dolería el
doble pero no dejaría marca.
Estaba ayudando en la cocina y de pronto mi cabeza se quedó
en blanco en lo único en que podía
pensar era en que esa noche quizás sería el límite, estaba muy temerosa, por mi
culpa Ronal fue agredido, así que con el cuchillo que tenía, me corte, fue
menos doloroso que las noche de angustia que pasábamos Ronal y yo, ya Ronal ni
siquiera quería comer, me pregunto por qué a nosotros, si no hicimos nada malo,
solo quería huir, y esa fue la manera más fácil de escapar de la realidad que conseguí.
Me sentí llena de paz y de tranquilidad cuando perdí la conciencia ya no haría
lo que él quisiese conmigo pero cuando desperté no estaba ni en el cielo ni en
el infierno sino en el purgatorio pues no había muerto y tenía que regresar a
el orfanato y a las noches de tormento, en ese momento me di cuenta que Ronal aún
seguía allí y peor aún, solo. Era más fácil y más tranquilo estar muerta que
viva, lo había olvidado pero la vida no es fácil y yo ya tenía algo por que
vivirla, en la primavera de mis 12 años sentí la muerte por primera vez.”.
Fue necesario que parara de leer aunque estaba
consternada con lo que había leído, estaban llegando y seria hora de cenar.
Esa cena me fue difícil de tragar viendo a la pobre e
indefensa Loli, estaba muy confundida ella había pasado por muchas cosas y la
juzgue mal, aun no me cae bien y dudo que en algún futuro lejano lo haga,
sentía mucha lastima hacia ella.
Primero fue una
manipuladora llamada diana y luego una indefensa niña acosada a la que le
decían Loli, quizás si en ese momento hubiera cambiado mi concepto de ella hoy
todo sería diferente, pero a la conclusión a la que llegue era simplemente la
manera de no sentirme mal con lo que había dicho y hecho era una conclusión
inventada de mi para mí y lo peor es que, me la creí, para así poder guardarle
un poco de rencor, esa noche no pude dormir pensando en que le pasaría a Loli, cada
vez que leía el diario tenía la sensación de que era un libro de drama, pero la
verdad era una realidad de la que no se puede escapar.
La presentación de Lored será en unos días y es obvio
toda la familia ira incluso yo, esta vez lo espero con ansias.
Al final pude dormir un poco. Esta mañana me di cuenta es
domingo!!! La semana ya acabo, están a punto de acabarse las vacaciones. Como
de costumbre los domingos dormimos hasta tarde menos lored que siempre se
desaparece sin decir a donde y no llega sino hasta la cena pero eso es normal
para nosotros y no es la única vez en la semana, abecés desaparece mas de un
dia pero eso lo arregla con papa y mama no es de mi incumbensia, como no es de
mi incumbencia que es lo que hay escrito en el diario pero es como si algo me
obligara a leerlo. Siento muchas ganas de saber, pero pronto me descubrirán asi
que tengo que dejarlo.
¿Cuantas veces ya he pensado en hacer eso pero no he
podido?…
En fin hoy me relajare.
Dormí plácidamente toda la tarde y me desperté con la
carisia de una calida y grande mano, esto me parece muy familiar, pero no pude
recordar que me hacia pensar eso. Mi padre me estaba despertando, quería salir
a comer conmigo y con mama.
Me emociona, hace ya un tiempo que no salgo a solas con
mis padres, a solas me refiero a sin lored, es como si fuese indispensable en
todo lo que hago, hasta en lo que pienso, esto no se trata de ella se trata de
mi.
-la cena esta deliciosa. Estaba diciendo mama para romper
el silencio no se por qué pero en ese momento se sentía incómodo el ambiente,
se sentía como si no hubiésemos pasado tanto tiempo juntos como para no saber
de qué hablar o como si todos hubiésemos tenido una gran pelea y no supiéramos
que hacer, de alguna manera mi relación con papa había cambiado dejo de esperar
cosas de mi y empeso a esperar cosas de lored cosas mas grandes de las que
pudiera imaginar eso me molesto como si no pudiera esperar grandes cosas de mi,
de pronto el ambiente comenso a cambiar y sentí como si lored nunca ubiese
llegado a estropear mi familia me divertí mucho de un momento a otro y de
pronto salio el tema.
- este martes es la presentacion de lored, ¿vas a ir no es
verdad?... Me quede en blanco, 3 segundos después me puse a pensar.
- ¿LILI? ¿Vas verdad?... segui comiendo no tenia que
pensar en nada ya yo había desidido ir asi que no había porque pensarlo
nuevamente, además papa me había dicho lili el me dice asi solo cuando quiere
que lo complazca es como un niño.
_oh, si claro ire.
Cuando llegamos de cenar aun lored no estaba ahí seguí
derecho hacia mi cuarto sin siquiera mirar el suyo, sin pensar en su diario.
